En memoria de Don Ignacio Pérez-Olivares Delgado, Notario Ilustre, que fue de Benidorm.
Difícilmente se realizará algún día una película sobre nuestro trabajo de registradores o de notarios; no obstante, para Ignacio, las conversaciones sobre los entresijos de la función, suya y nuestra, eran sus preferidas.
Dejó un gran vacío en Monesterio, para acercarse a su querido Cabo de Palos y llenar la plaza de Benidorm con su sencillez, afabilidad y buen hacer.
Porque lo suyo era vocacional, vivía la función con la ilusión del que va a jugar las primeras veces su juego favorito siendo consciente de que se le da de maravilla, y por eso, siempre con una sonrisa.
Tu enorme corazón se paró cuando ibas a trabajar.
Ahora te vas a tu último destino y dejas llenos de tu recuerdo nuestros corazones.
Una película no, amigo, primo, pero unas letras, que es lo nuestro, es lo menos.
Por Federico Trillo-Figueroa Molinuevo, Registrador de Villajoyosa 1.
Nota: El equipo de redacción de NyR se suma al dolor por la pérdida de este joven y excepcional compañero, y envían un cálido abrazo a su familia. Descanse en paz.