En realidad, el desarrollo de este libro pretende ser una posible respuesta a la “inatacable” pregunta de: ¿por qué un mismo inmueble tiene que ser descrito de forma diferente en el Registro de la Propiedad y el Catastro, cuando se trata de una única entidad?

 Y pretende ser una postura alternativa a la respuesta tradicional que nos lleva necesariamente a la imposición de una de las dos descripciones (normalmente la catastral) sobre la otra y a la imposición de una de las dos titularidades (normalmente la registral) igualmente sobre la otra.

Siempre defendí la idea de que la existencia de ambos focos de información inmobiliaria, Registro y Catastro, sin duda constituía  para el Sistema de Información Territorial de España, un elemento de enorme riqueza  económica y social, no una causa de confusión, alarma o elevación de costes. Y esa enorme riqueza a la que me acabo de referir, nace precisamente de resaltar para complementar las diferencias existentes entre ambas funciones.

Allá donde el Registro es diferente del Catastro, nace una relación que, de ser debidamente aprovechada, siempre produce unos efectos mucho más potentes que los que cualquiera de las instituciones hubiera podido producir por separado. 

Esta obra pretende analizar hasta dónde puede resultar útil la interoperabilidad entre las distintas dimensiones de la información registral y la información catastral.

Mas allá de señalar el mayor o menor valor jurídico o fiscal en cada uno de sus aspectos, pretendo aprovechar los numerosos rasgos que ofrece cada una de estas instituciones, para simplemente intentar hacer ver al lector “lo que nos podríamos estar perdiendo” por no abordar la relación de la manera que trato de explicar a través de las páginas de este libro.   

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Editorial Tirant Editorial