RECETAS CON ÉXITO GARANTIZADO PARA SALIR DE LAS CRISIS
 

Daniel Iborra Fort, Notario de Vilafranca del Penedès (Barcelona)

El análisis de los resultados de las Economías de las diferentes Naciones durante 1984, es el mejor procedimiento para juzgar la gestión de los Gobiernos correspondientes.

Tal como procederíamos con las empresas, la mejor manera de conocer como funcionan es analizar los resultados, de esta manera podremos valorar la gestión empresarial en relación, no sólo con las empresas de la competencia, sino con las gestiones anteriores. La Economía no perdona, los resultados son los que califican una gestión.

Situados en el mundo internacional, y simplificando, hay dos grandes ámbitos donde operan dos diferentes maneras de concebir la Economía: los países situados en el ámbito de la Economía de Mercado o Capitalistas, y los países de Economía de Estado o Marxistas. En cada una de las grandes zonas se han producido, en 1.984, profundas diferencias de resultados entre las naciones. A la cabecera del crecimiento de los países importantes con Economía de Mercado, se encuentra EEUU, mientras que China ocupa el liderazgo de crecimiento entre los países marxistas. 

EEUU acaba 1984 con un crecimiento real del P.N.B. de un 6’8%, el más fuerte desde hace más de 33 años. La inflación creció un 3’7%, el nivel más bajo desde 1967 y el empleo creció entre un 4 y un 5%.Después de dos años en el tercer puesto, EEUU pasa a ocupar el primer lugar y el liderazgo mundial en cuanto a competitividad y productividad, desplazando a Japón, que pasa al puesto 3º, detrás de Suiza, según la investigación realizada por European Management Forum.

China, durante 1984, presenta un incremento, en la producción agraria, de un 9,9%, según el Buró Estatal de Estadística, los cultivos agrícolas un aumento del 8’9 y la ganadería de un 1l,7%. Resultados que consolidan la tendencia positiva iniciada en 1978 en que se aplican las nuevas medidas en la agricultura. La producción industrial ha crecido, según el informe del Secretariado General del GATT, en un 13’5%.

En los dos países estos resultados han provocado un incremento del bienestar del pueblo, del que son manifestaciones: la creación de nuevos puestos de trabajo y nuevas oportunidades donde realizar las inquietudes personales y el incremento del consumo privado (incremento de la demanda de automóviles, expansión de la construcción, mayor adquisición de bienes de consumo doméstico....).

En cuanto a las razones de esta diferenciación de resultados de estos dos grandes países respecto al resto, nos remitimos a los artículos de fecha 23/12/1984 y de fecha 17/02/1985 En ambos se estudian las condiciones institucionales, sociales y hasta sicológicas de las Economías respectivas.

Pero haciendo un análisis profundo, encontramos en ambas Economías ciertos puntos de coincidencia:

1) Ambos Gobiernos han apostado por el engrandecimiento económico del país, reconociendo el protagonismo al sector productivo. China, incluso, ha cuantificado el desarrollo, cuadriplicar la producción para el año 2.000.

Asentado este principio básico, todas las decisiones políticas lo desarrollan en un conjunto armónico sin vaivenes ni normas contradictorias.

2) La mejor manera de fortalecer y expansionar el sector productivo, es el de reconocer y aceptar el beneficio particular como elemento psicológico motriz para la creación de riqueza nacional, por parte de los ciudadanos:

 En EEUU se reducen los impuestos de manera drástica e importante (en un 25%).

En China se abandona el principio igualitario, y se introduce el sistema de responsabilidad que liga el salario o la remuneración del trabajo al rendimiento. En el campo, sobrepasada la cuota de entrega obligatoria de productos al Estado, el resto queda a disposición del productor.

En cuanto a la industria, al director de la empresa le corresponde fijar salarios y primas de acuerdo a la productividad, llegando su libertad al despido del trabajador que no se ajuste al régimen de trabajo de la empresa.

3) Reconocimiento del principio de la eficacia de la iniciativa privada y del esfuerzo y responsabilidad individual, para solucionar los problemas de la Economía, y, en consecuencia, desconfianza en la gestión económica del Estado y del intervencionismo burocrático.

Esto, que es evidente en EEUU, se ha traducido en China en una serie de medidas que apuntan en esa dirección. En el campo, descolectivización y sustitución del sistemas de comunas, por agricultores individuales y cooperativas de campesinos. Restablecimiento del sistema de libertad de mercado y de precios. Privatización parcial de la minería. Incremento de la autonomía en la gestión de las empresas públicas. Apertura al exterior. Creación de zonas económicas especiales y de ciudades con régimen económico particular.  

4) Confianza de los Gobiernos en la capacidad productiva de sus ciudadanos y conexión sicológica de éstos con la clase política dirigente. Con lo que se logra que las iniciativas y proyectos individuales se aglutinen en un proyecto común de expansión nacional, en donde encuentran justificación última y límite los diferentes movimientos individuales.

En consecuencia, seguridad en los recursos del propio país para salir de la crisis e iniciar el camino de la expansión, con una política propia y ajustada a los intereses nacionales. No hay desviaciones de la atención pública a responsables anteriores ni exteriores, serán los resultados de la Economía y el bienestar del Pueblo los que valoren la gestión política presente.

5) Racionalización de la Gestión Pública, ajustándola a principios de eficacia económica. La decisión política será valorada por sus resultados. Tal como escribíamos en relación a China, “en principio todos los medios son válidos... la solución la determina su rentabilidad social”.

En el otoño pasado, Deng Xiaoping, ante las críticas a las nuevas medidas institucionales, calificadas como capitalistas .y alejadas de la ortodoxia marxista por el sector más conservador del partido, comparó las decisiones y los actos del Gobierno con los gatos, hay de diferentes colores pero los que en estos momentos interesan, son los que sepan cazar ratones.

6) Canalización de todos los recursos humanos y materiales disponibles al sector productivo. Los recursos son escasos y hay que saber administrarlos bien, en consecuencia, deben dirigirse a donde produzcan una mayor rentabilidad social. Por lo tanto, reducción del gasto público con objeto de liberar recursos para la expansión del sector productivo.

Esta evolución se ha materializado en un descenso en los gastos públicos civiles en EEUU, desde un 9’3 del P.I.B. en 1980 a un 8’4% del P.I.B. en 1983. También China sigue el mismo proceso, el 21/04/1985, publica la prensa la siguiente nota: “Los máximos responsables de la política económica de la República China han iniciado una serie de estudios con el fin de reducir las cifras dedicadas a gastos públicos. La primera decisión que se tomará en breve afectará a los gastos de defensa. Concretamente, el Ejercito reducirá de forma importante el número de miembros de las Fuerzas Armadas”.  

Reconocimiento del protagonismo del sector productivo, del que depende la riqueza de la Nación, incentivación  sicológica y económica de los agentes productivos, reducción del gasto público, pragmatismo en la gestión pública, y confianza en la iniciativa y el esfuerzo de los ciudadanos, son las recetas que estos dos grandes países han venido utilizando para lograr la expansión de estos últimos años.  

La experiencia ha sido lo suficientemente positiva para que los Gobiernos y los Pueblos del resto de países, tengan una mayor claridad de ideas para resolver sus crisis internas.

DANIEL IBORRA FORT, 15 DE MAYO DE 1.985

( Texto incluido en el libro “ DE COMO SE PUEDE RESOLVER LA CRISIS ECONÓMICA, EL PARO, LA CORRUPCIÓN POLÍTICA Y TENER UNA DEMOCRACIA EFICIENTE, LEYENDO UN PEQUEÑO LIBRO – 2.009)

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